A todo el mundo, cuando se habla de Asunción Balaguer , le viene a la cabeza la imagen de una entrañable anciana de pelo blanco, menuda y de sonrisa amable pero son muy pocos los que recuerdan sus primeros trabajos como actriz de teatro.
Asunción de joven ya prometía una brillante carrera como actriz pero el amor se le cruzo por medio y dejó esa faceta para dedicarse a la familia. Ese amor se llamaba Paco Rabal.
A finales de los años 40 Asunción Balaguer era una joven promesa cuando trabajaba en la compañía de teatro Lope de Vega. Apuntaba maneras y deslumbraba entre sus compañeras, pero pronto aquel futuro brillante se ensombreció. Fue entonces cuando apareció un atractivo, simpático y ‘truhan’ actor en su vida que la conquistó para siempre, Francisco Rabal.
Paco se declaró a Asunción en un autobús cuando viajaban de Córdoba a Algeciras. Se casaron en 1951 y formaron un tándem perfecto a pesar de sus diferencias. Dedicaron su vida a la actuación, aunque no en partes iguales. Mientras Paco triunfaba, Asunción aparcó su carrera de actriz para dedicarse a sus grandes amores: su marido y sus dos hijos, Teresa y Benito.
La vida de Asunción quedó relegada a un segundo plano. Era una actriz con un único papel que interpretar: el de esposa.
Hasta que el 29 de agosto de 2001 su marido, el gran actor Paco Rabal, falleció cuando viajaba en avión.
La pareja regresaba a casa tras recoger un premio en Montreal cuando Paco sufrió un enfisema pulmonar. El avión realizó un aterrizaje de emergencia en Burdeos pero ya era demasiado tarde, no se podía hacer nada por él. Paco Rabal murió brindando con una copa de champagne, celebrando su último premio junto a su esposa.
Tras la muerte de su marido, Asunción Balaguer retomó la interpretación. Llevaba ansia de tablas acumulada y se comía los escenarios de los teatros. Era una actriz de altura, pero siempre había estado en la sombra. Quién sabe lo que podría haber conseguido de no haber dejado aparcada su carrera de actriz tantos años.
Querían que fuese eterna pero el 23 de noviembre de 2019 la actriz fallecía a los 94 años a causa de un fallo multiorgánico en el Hospital La Fuenfría (Cercedilla, Madrid), después de un últimos adiós se trasladaron sus cenizas a Águilas (Murcia) donde descansa con el que, a pesar de todo, fue el amor de su vida, Paco Rabal.